Por Gato Negro.
Al ver una película en un idioma extranjero, los subtítulos se vuelven una parte importante del filme, eso es claro. Algunos tenemos la suerte de manejar suficiente inglés como para ver una cinta en dicho idioma sin requerir las letritas blancas (o amarillas) que aparecen abajo, pero si se trata de una lengua diferente –como “House of Flying Daggers” de Zhang Yimou- esas palabritas mágicas se vuelven realmente imprescindibles.
Lamentablemente, en ocasiones, hay errores patentes en los subtítulos que hacen bastante tedioso el sentarse frente a la pantalla. Recuerdo el caso de “Spider-man 2” en el que una palabra aparece mal “ti´peada”, demostrando claramente que quien revisó el filme subtitulado lo pasó por alto, y el encargado de traducir los diálogos deslizó mal su dedito por el teclado. Otro ejemplo de este hecho lamentable puede ser la serie de HBO “Los Soprano” en la que en algunos episodios, si nos fijamos, los diálogos y los subtítulos están desfasados temporalmente.
En otras ocasiones, los muy inteligentes traductores, nos ponen letras blancas en fondos blancos, haciendo imposible el poder leerlas. Una excepción es “300” en la que en una parte de la película, los subtítulos aparecen arriba de la pantalla y no abajo, resolviendo ese gran inconveniente que se viene repitiendo desde hace mucho. Otra solución para ese problema, son las letritas amarillas, que aunque mucho menos estéticas que sus colegas blancas, por lo menos caen en el gran error menos veces. Nada que decir sobre la censura u omisión de palabras fuertes, aunque cuando esto se realiza en una película con clasificación R, para mayores de 18 años, es una gran falta de respeto para el que escucha “fuck” y espera que salga una chuchada en letras blancas.
La última vez que me pasó esto del conflicto con los subtítulos fue con Hard Candy. En esa película los subtítulos eran una real mierda. Partiendo porque cometían el gran error de poner blanco sobre blanco, siguiendo por desfases temporales, frases repetidas sin razón, censura de palabras obscenas (siendo categoría R) y finalmente -el error que más me dolió- el cambio del nombre de un personaje de Jeff a Goeff, aún cuando en los créditos sale como Jeff. ¿Qué les pasó? ¿Se aburrieron tanto que no llegaron hasta los créditos? No tengo ni la más mínima idea, pero es un abuso contra el público que paga sus sobrevaluadas entradas el presentar unos subtítulos tan mal hechos.
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